Es conocido que el uso de las contraseñas se remonta a la antigüedad, desde aquellos centinelas que vigilaban cierta posición y que solicitaban palabras exactas para permitirle el paso a las personas, hasta la tecnología de estos años recientes en donde tenemos que utilizar alguna para asegurar cada paso que damos en esta vida.
Muchos de los sitios web que utilizamos por negocios o por ocio solicitan nuestra información personal como nombre, cuenta/número de la tarjeta de crédito y otros datos que son utilizados para identificar a clientes o colaboradores. Además, frecuentemente utilizamos esa información para completar órdenes de compra, liquidar salarios o desempeñar otras funciones propias de la operación de nuestro negocio o para entretenimiento.
Sin embargo, si tu contraseña para ingresar a esa información cae en manos de algún hacker estará latente la posibilidad de sufrir robo de identidad o hasta fraudes monetarios que pondrían en riesgo tu patrimonio. En cambio, si el hacker ha descubierto la contraseña de tu correo electrónico podría visitarlo frecuentemente para robarte información valiosa, quitarte el acceso a tu cuenta y/o utilizarlo para enviar spam a todos tus contactos.
A pesar de esto, muchas personas no invierten suficiente tiempo para crear una contraseña compleja que puedan memorizar para cada una de sus cuentas y, en cambio, utilizan una simple que aplican para todo (facilitando la labor de la delincuencia cibernética).
Entre las contraseñas más simples que la gente tiende todavía a utilizar están:
• 123456
• qwerty
• fecha de nacimiento
La solución es más simple de lo que parece: Crea contraseñas mezclando letras minúsculas con mayúsculas, números, caracteres especiales y asegúrate de utilizar una diferente para cada sitio o red social que utilices (no olvides cambiarlas periódicamente). Aunque con esto no evitarás que hackeen a tu proveedor de servicios, al menos si podrás prevenir un desastre mayor.
Además, existen diversas guías para proteger tu información personal que incluyen desde la protección de tu inventario hasta recomendaciones para manejar tus datos online.
¿Conoces otra forma de proteger tu información personal? Déjame tus sugerencias e iniciemos el debate.
Jorge Chávez es Editor Senior en Mijo! Brands de México.