En lugar de sentirse amenazados por la Era Digital y las nuevas expectativas de los turistas, los encargados del turismo deberán recibirlos con una cultura de innovación, adaptación y colaboración. Crear la marca de un destino turístico es más importante hoy que nunca.
Los días en los cuales los administradores turísticos se limitaban a crear publicidad y emitir boletines de relaciones públicas se han acabado. Ahora el campo de trabajo se ha extendido a las redes sociales, teléfonos inteligentes, tabletas, GPS, comercio electrónico, reservaciones en línea, contenido generado por usuarios, crowdsourcing y a la posibilidad de alcanzar a posibles consumidores en todo el mundo a través del internet.
Las páginas web ahora pueden mostrar video, texto, audio, fotografías y comentarios en tiempo real de consumidores. Los turistas pueden exponer su opinión antes, durante y después de su visita. El contenido generado por usuarios le da la oportunidad a los consumidores de comparar opiniones, puntuar experiencias, postear imágenes y hacer comentarios para asistir a otros.
Esto deja poco espacio para la propaganda.
Para sobrevivir, los administradores turísticos deben aprender estas nuevas habilidades y ser capaces de adaptarse para mostrar los beneficios y distintivos de los destinos, en pocas palabras, su identidad de marca debe de ser guiada cada vez menos por políticas y apaciguamiento y más por colaboración, desarrollo de producto y enfoque al consumidor.
A pesar de que es cierto que las innovaciones tecnológicas son muchas, es aún más cierto que muchos cambios profundos han afectado al comportamiento del consumidor influenciando cómo se comunican, compran, trabajan, se relajan, aprenden, consumen y reaccionan.
Los destinos deben adaptarse a estas nuevas reglas y comportamientos de los consumidores y seguir utilizando su marca para que los socios sean capaces de contribuir y crear marcas con más significado.
Escrito por Marie Nelson para Mijo! Brands de México.